martes, 31 de diciembre de 2013

NAVIDAD  EN CASA SAN JOSÉ, BOLIVIA

Los niños y adolescentes de Casa San José de Cochabamba (que se dedica a atender a chicos en situación de calle) celebraron la llegada del Niño Dios. Con ellos estaban también algunos de sus familiares que acudieron a visitarlos y las personas que los cuidan.
çLos niños presentaron una puesta en escena del nacimiento de Jesús, este año a través de mimos, en la que participaron con mucho entusiasmo y dedicación.

Luego compartieron una deliciosa cena de Navidad. Con la visita de los familiares se creó un hermoso momento para compartir y recordar que Jesús nos pide en su nacimiento que nos sepamos amar mutuamente.  Es indudable que a todos les quedará un bonito recuerdo de la Navidad 2013 en Casa san José, tal como vemos en estas simpáticas fotos.








martes, 24 de diciembre de 2013

¡FELIZ NAVIDAD!

El día 19 de Diciembre en el centro formativo San José del Ajusco (México) tuvimos una pastorela, que es la representación del nacimiento del Niño Jesús. Este evento fue organizado por las maestras y varias colaboradoras. Todos los niños del centro participaron en la representación, y aunque habían ensayado durante días y la mayoría estaban muy contentos algunos se pusieron nerviosos al tener que actuar frente a tanta gente, especialmente sus padres, que por su parte estaban encantados de ver a sus hijos en el escenario. Es una gran alegría ver a los niños felices haciendo esta actuación navideña, muy popular en México.
 
Aprovechamos estas líneas para desearos a todos los amigos de la Comunidad de San Pablo una ¡Muy Feliz Navidad!

miércoles, 18 de diciembre de 2013

ESPACIO DE REFLEXIÓN

Estar en Adviento: entre la búsqueda y la sorpresa

El Adviento es probablemente uno de los tiempos litúrgicos menos conocidos en la sociedad civil, y quizás de los menos populares dentro de ambientes creyentes. Este abandono se sitúa en marcado contraste con la Navidad, que puede presumir de ser la fiesta religiosa más conocida del planeta. La Navidad también es, hay que admitirlo, aunque sea con rubor, la más secularizada de las fiestas de guardar. La secularización  es ese proceso invencible mediante el cual cualquier fiesta o acto transcendente, espiritual o religioso, se convierte en una tradición más o menos vacía, con oportunidades comerciales suculentas o en folklore más o menos festivo que entra a formar parte del depósito cultural de una sociedad. A pesar de que la Navidad haya sido desnudada de su componente religioso, su importancia parece haber empujado al Adviento al rincón del olvido. Pero no nos dejemos llevar por apariencias navideñas: el Adviento como tiempo litúrgico puede que esté condenado al anonimato, pero no por ello es menos celebrado.

martes, 10 de diciembre de 2013

CAMINO AL SACERDOCIO

El sábado 7 de diciembre Michael Wolfe, miembro de la Comunidad de San Pablo, fue instituido acólito en el seminario de Saint Francis de Sales de Milwaukee (Wisconsin, EE.UU.), junto a tres compañeros de su curso. Tras el lectorado, el acolitado es el segundo paso hacia el sacerdocio. Presidió la ceremonia Mons. Donald Hying, obispo auxiliar de Milwaukee, y concelebraron varios presbíteros, tres de ellos de la Comunidad de San Pablo. Michael y sus compañeros siguen el proceso para ser ordenados sacerdotes en mayo de 2016. 
Mantengamos estas vocaciones presentes en nuestras oraciones.


 

jueves, 5 de diciembre de 2013

DOCUMENTAL SOBRE EL TRABAJO DE LA COMUNIDAD DE SAN PABLO EN LA REPÚBLICA DOMINICANA

Para dar a conocer el trabajo de la Comunidad de San Pablo y la Parroquia La Sagrada Familia en la República Dominicana, se ha editado un documental de 26 minutos. En éste se muestran las acciones y proyectos que llevamos a cabo en la zona de Sabana Yegua (Azua) así como los retos que la población afronta. El documental ha sido realizado por la empresa CREARSA (www.crearsa.com), a quienes agradecemos su labor desinteresada. 

Abajo podéis ver el documental.



lunes, 25 de noviembre de 2013

LA CASA SAN JOSÉ EN EXPOIGLESIA COCHABAMBA (BOLIVIA)

El pasado 18 de octubre se llevó a cabo “ExpoIglesia”, una hermosa feria en la que el Arzobispado de Cochabamba daba a conocer las distintas obras sociales que realiza la Iglesia al servicio de la población cochabambina. La Casa San José también participó y mostró el trabajo que allí se realiza acogiendo a los niños y adolescentes, así como su proceso para la reinserción familiar.

Los niños, adolescentes y todo el equipo de Casa San José tuvieron la oportunidad de ofrecer a los visitantes el libro de cuentos “Pequeñas Historias Fascinantes” y los pinos y setas producidos en la zona montañosa de Totorapampa.


jueves, 21 de noviembre de 2013

A FONDO

Celestino V, Ramon Llull y el ejemplo de Blanquerna

A raíz de la inesperada renuncia de Benedicto XVI hace ya ocho meses, se habló mucho, lógicamente, de los precedentes históricos que tuvo esta “abdicación” papal. Aunque hubo quien describió tres renuncias previas a la sede romana (la de Joseph Ratzinger sería entonces la cuarta), esto no es exacto. Se menciona a Benedicto IX (1045), a Celestino V (1294) y a  Gregorio XII (1415). En realidad, sólo la de Celestino V puede considerarse una renuncia en toda regla. La única hasta la de 2013. Veamos muy brevemente por qué las otras dos no deberían presentarse propiamente como renuncias, para pasar luego al nudo de nuestro tema.

En cuanto a Benedicto IX, todo su papado fue caótico y conflictivo: elegido en 1032, pronto dio muestras de no entender las responsabilidades básicas que su cargo implicaba, y en 1044 fue expulsado por el pueblo de Roma en medio de grandes disturbios. Otro papa fue elegido (Silvestre III). Benedicto regresó a las pocas semanas y expulsó a su rival, pero finalmente, ante los rumores de que se iba a casar, y a cambio de una fuerte suma de dinero, cedió sus funciones a Juan Graciano, que sería elegido papa con el nombre de Gregorio VI (1045); ésta es su supuesta renuncia. De nuevo se arrepintió Benedicto de haber dejado el papado y trató de expulsar a Gregorio, sin conseguirlo: finalmente, en 1046, en el Concilio de Sutri, tanto Benedicto como Silvestre y Gregorio fueron destituidos, y un  nuevo papa fue elegido (Clemente II). Parece ser, además, que Benedicto nunca cesó, el resto de su vida, de luchar por reconquistar el papado.

jueves, 14 de noviembre de 2013

UNA SENTENCIA INJUSTA Y ABSURDA

Desde hace ya varias semanas diversas organizaciones civiles y algunos sectores de la Iglesia Católica en la República Dominicana han levantado la voz en defensa de los derechos fundamentales de todos los perjudicados por la sentencia número 168-13 del Tribunal Constitucional del país. La comunidad internacional también ha empezado a denunciar la flagrante injusticia de dicha sentencia, que amenaza con dejar a cerca de 200.000 personas sin identidad nacional. Es obvio que cada país es soberano para establecer sus leyes de inmigración y decidir a quienes les concede la nacionalidad o a quienes no; en lo que no se puede estar de acuerdo es que el Tribunal Constitucional dominicano, en esta sentencia, arrebata la nacionalidad a ciudadanos y ciudadanas dominicanos a la vez que viola la Constitución Dominicana vigente desde 2010.

Todo este conflicto comenzó en 2012 con el recurso de revisión constitucional presentado por la señora Juliana Dequis Pierre, de padres haitianos, pero nacida y afincada toda su vida en República Dominicana. El recurso se originó porque la Junta Central Electoral se negó a entregarle un acta original de nacimiento para tramitar su cédula de ciudadanía. La negativa se debía a que la Sra. Dequis tiene apellidos haitianos. Como resultado de dicho proceso el pasado 23 de septiembre de 2013 el Tribunal Constitucional falló en favor de la Junta Central Electoral y a la señora Juliana se le denegó el derecho al acta de nacimiento y con ello a su nacionalidad. En la misma sentencia el Tribunal abría la puerta a desnacionalizar a más de cuatro generaciones de dominicanos y dominicanas que están en la misma situación legal que la señora Juliana Dequis Pierre. Se deriva de la sentencia que el único delito que han cometido es ser de ascendencia haitiana.

En resumen: esta sentencia arrebata la nacionalidad a todas aquellas personas que durante ocho décadas (desde 1929) fueron registradas como dominicanas pero cuyos padres eran “migrantes irregulares”. Ello afecta directamente y sobre todo a miles de personas de ascendencia haitiana que hasta ahora estaban al amparo de la Constitución y de las leyes vigentes en el momento de su nacimiento y ratificada en el artículo 18.2 de la actual Constitución (de 2010). Se calcula que cerca de 200.000 dominicanos de origen haitiano quedarán afectados por esta ley. En el caso de que se aplique, perderán su nacionalidad y se convertirán en apátridas, la mayoría de ellos de manera retroactiva por el supuesto delito de sus padres o abuelos, que llegaron y vivieron en el país de forma “irregular”. 

Esta polémica sentencia, además, decide ignorar algo obvio: que la inmigración haitiana en la República Dominicana es (como todos los fenómenos migratorios) un proceso complejo, propiciado por causas económicas, en el que las dos partes (el país que envía y el que recibe los inmigrantes) obtienen beneficios. El inmigrante busca salir de la pobreza, y quien lo recibe obtiene mano de obra barata para su economía nacional. Penalizar a hijos y nietos de inmigrantes irregulares haitianos, negándoles la nacionalidad, después de que sus padres y abuelos fueran traídos mediante contratos bilaterales entre los dos gobiernos, y se establecieran y trabajaran en durísimas condiciones en la República Dominicana, es, en pocas palabras, un ejercicio de cinismo.

Por otra parte, la sentencia debilita el estado de derecho del país y, con ello, incrementa la vulnerabilidad de los más pobres, al violar los principios de favorabilidad y no retroactividad de la ley, establecidos en la Constitución Dominicana de 2010 en los artículos 74.4 y 110 respectivamente. Los afectados por la sentencia son hombres, mujeres y niños que consideran la República Dominicana como su única patria, pues no conocen otro país ni otra cultura, ni otra lengua, son 100% dominicanos y sin embargo, ahora se les niega dicha nacionalidad.

La sentencia no sólo perjudica a miles de dominicanos y dominicanas sino que alienta en el resto de la población el anti-haitianismo (de hondas y complejas raíces históricas y sociales) que siempre ha estado latente pero que ahora se hace explícito, creando, por ende, más malestar y conflictos sociales. Sectores autodenominados “nacionalistas” han salido a las calles a respaldar la sentencia del Tribunal Constitucional y a negar la injusticia que dicha sentencia supone. Si fueran realmente nacionalistas defenderían el derecho a la nacionalidad de todos aquellos dominicanos y dominicanas afectados por la sentencia. Una vez más se ve que en el trasfondo de la cuestión está el resentimiento hacia el pueblo haitiano y su descendencia en República Dominicana.

En estos momentos el país está dividido entre los que aplauden la sentencia y los que la desautorizan. Las encuestas muestran que más o menos la mitad de los dominicanos apoya la sentencia y la otra mitad la rechaza. También hay quienes están de acuerdo con la sentencia pero no con su carácter retroactivo hasta 1929. Esta división, aparte de generar malestar social, perjudica las relaciones entre los dos países y afecta negativamente a la economía binacional. Los afectados por la sentencia 168-13 carecerán de documentos legales para estudiar, trabajar, registrar a sus hijos o acceder a cualquier servicio básico público. Es una situación crítica a la que un estado democrático del siglo XXI debe saber encontrar soluciones que pasen por respetar los derechos humanos de todos los que viven y trabajan en su suelo. El camino que les queda a los afectados es luchar para que se respeten sus derechos fundamentales, haciendo oír su grito de angustia a la comunidad internacional, esperando que el mundo se solidarice con ellos. Y para los que trabajamos con ellos, el camino es acompañarles en esta lucha por el respeto de sus derechos fundamentales y ayudarles a hacerse oír.   

Juan Manuel Camacho

lunes, 11 de noviembre de 2013

ÚLTIMA CHARLA DE LA SERIE SOBRE EL CONCILIO VATICANO II EN RACINE (WI), EE.UU.

El lunes 28 de octubre, el P. Pere Cané, presidente de la Comunidad de San Pablo, dio la cuarta y última charla sobre el Concilio Vaticano II auspiciada por la Comunidad de San Pablo y la Parroquia Sacred Heart de Racine. La ponencia, titulada “La Iglesia en que creemos: entender nuestra profesión de fe a la luz del Concilio Vaticano II”, comenzó con una contextualización del Concilio y sus documentos para después pasar a la comprensión de Iglesia que nos ofreció el Vaticano II: una, santa, católica y apostólica. La charla, a la que asistieron unas 70 personas, fue seguida por un animado debate. Agradecemos a los ponentes y a los voluntarios de la Parroquia Sacred Heart su colaboración en esta serie de charlas y también, desde estas líneas, damos las gracias a todos los que asistieron a las conferencias.



jueves, 7 de noviembre de 2013

ESPACIO DE REFLEXIÓN

El arte de sintonizar

Parte de los muchos problemas inherentes a la convivencia humana es la dificultad que a veces tenemos las personas para sintonizar nuestras emociones y estados de ánimo unos con los otros. A veces un gran acontecimiento y otros una concatenación de circunstancias muy simples e irrelevantes puede hacer nuestro día brillante. Y precisamente ese día no entendemos cómo la persona que tenemos al lado parece no apreciar el momento, incapaz de dibujar una sonrisa. Puede ser altamente irritante. Por supuesto también puede ocurrir lo contrario. Aquellas veces cuando nada parece ir bien e incomprensiblemente la gente que nos rodea parece estar pasándola de maravilla en su ignorancia, y sonriendo por las cosas más estúpidas. Eso también es irritante. Lo cierto es que es difícil lograr estar en sintonía con los estados de ánimo de otras personas. Primero, porque estamos profundamente convencidos, y con razón, de que nuestro estado de ánimo, la forma como me siento en este momento, es tan única e intrínsecamente mi prerrogativa que nadie tiene derecho a hacerme sentir algo distinto. En segundo lugar porque los estados de ánimo son muy reales, y no es tan fácil cambiar o modificarlos a voluntad. Es difícil pero no imposible.

Quizás una de las características que todos deberíamos intentar practicar más es la empatía. Aun siendo difícil, todos tenemos la capacidad de adaptarnos al estado de ánimo de los demás. Estamos dotados de la capacidad de ir más allá de nuestros propios estados de ánimo. Empatía es la actitud en la que dejamos que otros sean, por lo menos temporalmente, nuestro centro de referencia. A través de la empatía les permitimos que ocupen nuestro espacio emocional para su propio desahogo, consuelo y satisfacción. Que nadie se llame a engaño, es más difícil de lo que podemos imaginar. Imaginemos que alguien llorase la pérdida de un ser querido. No haríamos a esta persona ningún favor si empezamos, con el pretexto de ser empático, a explicar nuestras propias experiencias de pérdida. Lo mismo ocurriría, en positivo, cuando alguien que viene a nosotros muy contento para compartir las aventuras de un viaje reciente. Por supuesto que queremos ser parte de la conversación de una manera significativa, pero no mostraríamos ninguna empatía si empezamos a fanfarronear acerca de nuestras propias experiencias de viaje, tal vez a países más exóticos y aventuras más riesgosas. Empatía es dejarnos conquistar emocionalmente por los demás. Y sí, tiene que ser temporal. No sólo es difícil sino también muy agotador, muy desgastante. Todos necesitamos empatía de otros. Todos tenemos que ocupar espacios de otras personas, esta es la forma por la cual nos sentimos amados y queridos. En un grupo donde todos den sus espacios a la empatía, la necesidad de cada individuo de comprensión, compasión, de una voz amable y de un hombro reconfortante, se satisface sobreabundantemente. Es una tarea muy difícil, el mundo de las relaciones humanas es extremadamente complejo, pero cuanto más trabajemos en este intercambio, en esta red de empatía, más viviremos en el Reino de los Cielos.

Una nota final. Como sucede con el llanto o la risa, los estados de ánimo a menudo son contagiosos. La siguiente frase es injustamente dramática pero muy clara: “una manzana podrida estropea todo el montón”. A todos nos toca transformar esta imagen. Quizás en algo así: “una sonrisa fácil, un corazón cálido, una mirada gentil, una palabra amable, un gesto empático, puede difundirse y multiplicarse de manera sorprendente, inesperada y extraordinaria”.

                                                                               Esteve Redolad


jueves, 31 de octubre de 2013

LA HISTORIA DE DANIEL
En la Casa San José de Cochabamba siempre hay historias que contar. Cada chico en situación de calle que es acogido en esta casa tiene ya una larga historia de sufrimiento, de tristeza, pero también de superación y de esfuerzo.
Daniel tiene 13 años y lleva seis meses acogido en la Casa San José. Desde que era pequeño, su padrastro le maltrataba físicamente, y también a su madre. Lo mandó solo, con engaños, a la ciudad de La Paz, donde se extravió y acabó acogido una temporada en un centro de niños. Las autoridades lo mandaron a nuestro centro de Cochabamba, sabiendo que su madre y hermanos se encontraban acogidos en otro hogar de la misma ciudad. Allí su madre recibía ayuda psicológica y emocional para salir adelante junto con sus hijos. Actualmente la madre ha salido del hogar, vive con sus hijos menores y está en vías de encontrar un trabajo que le permita solicitar la reinserción familiar de Daniel. No lo ha hecho todavía, pero todos tienen esperanza de que esto ocurra pronto, cuando la familia tenga una estabilidad económica y social. Mientras tanto su madre y hermanos le visitan regularmente.
Una de las últimas visitas fue el día de su cumpleaños, una fiesta emotiva, con la familia y los compañeros de la Casa. Daniel, su madre y sus hermanos son un ejemplo de que a veces se puede salir del círculo de maltrato intrafamiliar y recomponer la familia, con mucho esfuerzo y mucho amor. Les deseamos que pronto estén todos juntos de nuevo.


lunes, 28 de octubre de 2013

A FONDO

LAS CARAS DE LA IGLESIA: ¿Y QUIÉN ES "LA IGLESIA"?

Los miembros de la Comunidad de San Pablo tenemos el gran privilegio de poder convivir, trabajar y aprender de diferentes sociedades, mundos y culturas. De esta manera, tenemos oportunidad de conocer diferentes caras de la Iglesia, tanto las formas en que los cristianos nos identificamos y relacionamos con ella, como también las diferentes caras que ofrecemos a la sociedad en distintos lugares del planeta. Cuando con frecuencia alguien nos pregunta cuál es la postura de “la Iglesia” sobre tal o cual tema, cómo es que “la Iglesia” no hace esto o lo otro, “¿has visto lo que ha dicho “la Iglesia” sobre tal asunto?”, me planteo cada vez más: ¿de qué Iglesia estamos hablando?

Para muchos de nosotros, la Iglesia Católica solamente tiene una cara: la más cercana, la que me enseñaron mis padres, la que nos transmiten los medios de comunicación social, la de mi parroquia, mi ciudad, mi país. He querido detenerme a pensar, por un momento, en las siguientes caras de la Iglesia que he podido ir conociendo en mi limitada experiencia.

En Europa, y en otras sociedades occidentales, hemos aprendido a dar un gran valor a las personas concretas, a su identidad irrepetible. A la vez, y en defensa del individuo, somos muy críticos ante las instituciones, sobre todo cuando sentimos que éstas limitan o coartan nuestras libertades personales. En nuestras sociedades de origen y mayoría cristiana, muchos vemos hoy a la Iglesia como una realidad alejada de nuestras vidas diarias, gobernada y representada por “otros”, portadora de unos valores antiguos, casi anacrónicos; y si no nos ofrece todo aquello a lo que aspiramos, nos mantenemos al margen.

Sin embargo, los misioneros son comúnmente percibidos como la otra cara de la moneda, la parte sana, valiente y admirable de la Iglesia, como si se tratara de sus “cascos azules” que de alguna forma logran redimir la imagen lejana y negativa de la Iglesia… La gran sensibilidad social y la defensa de los derechos del individuo que profesamos hacen que acabemos midiendo a la Iglesia por aquello que “hacen” sus misioneros, mientras que sus enseñanzas, que nos recuerdan el valor del sacrificio personal y las paradojas de la vida cristiana, nos generan rechazo. Esta es una cara de la Iglesia, que deriva en una actitud de indiferencia ante una institución a la que criticamos con facilidad pero a la que acudimos en momentos señalados de nuestra vida; a la que exigimos mucho y, en general, aportamos poco.

En África me he encontrado con una realidad bien distinta a la europea: aquí el ser humano tiene mucho más desarrollado su sentido colectivo, de pertenencia a un grupo humano concreto, y la religión es la que inserta a la persona en una historia y en una sociedad específica, a través del contacto con el pasado y con el futuro, con los ancestros y con la descendencia… Las personas, y los cristianos en concreto, encuentran en la Iglesia una Familia más que una institución, que les aporta un sentido de pertenencia, de seguridad, de acogida. Por otro lado, y para poder preservar este sentido de pertenencia, no tienen mayor problema en cambiar de iglesia o incluso de religión cuando las circunstancias cambian, ya que lo importante es pertenecer a un colectivo con identidad religiosa, no tanto si se trata de unos u otros. No siempre hay una conciencia clara de la identidad específica de la Iglesia Católica: el individuo no es nada si no pertenece, es la pertenencia lo que lo define, lo protege, le da una identidad,  y por lo tanto, ser católico, anglicano, musulmán o animista es igualmente válido, mientras sepamos que no estamos solos y que pertenecemos a una comunidad del presente, en contacto con el pasado y caminando hacia el futuro.

En el contexto africano he visto que no solemos preocuparnos demasiado por lo que ocurre en las “altas esferas”, porque se trata de nuestra familia, y lo que hagan los jerarcas es asunto de “mayores”. Nos sentimos parte de nuestra Iglesia, sobre todo a nivel local, grupal, familiar, aunque eso de la Iglesia universal posiblemente nos quede un poco lejos. Pero estamos orgullosos de nuestra Iglesia, en la que rezamos, bailamos, reímos y lloramos, como ocurre en todas las familias.

Haciendo otro salto, y habiendo vivido un tiempo en los Estados Unidos de América, he observado otra mentalidad que podría denominar de conciencia de “minoría” entre los católicos. Aquí vivimos sabiéndonos rodeados por otras confesiones cristianas y por otras religiones, y por lo tanto estamos un poco “a la defensiva”: tenemos que proteger nuestra identidad para que no se pierda la esencia, lo específico del ser católico: justo al contrario que en África, aquí se trata de defender una y otra vez aquello que nos hace diferentes de los demás grupos, incluidas las formas, las tradiciones, cualquier detalle. Y nuestra pertenencia a la Iglesia Católica es en ocasiones apasionada, buscando en todo momento aquello que nos hace ser católicos, que nos otorga identidad propia… ¡hasta a los curas muchas veces queremos convencerles para que sean más y más católicos, que se vea la diferencia!

Buscando esta cara de Iglesia militante, comprometida, segura de sí misma, queremos una Iglesia que sepa defender los valores sobre los que está fundada, y que no se diluya en un mundo de moral un tanto dudosa, y que nos genera cierta desconfianza.

En México, por otro lado, he observado que, junto a una élite todavía fruto de la Ilustración, escéptica en materia de religión, vive un sector amplio de población, resultante del mestizaje cultural y religioso, con un fuerte sentido de religiosidad popular, que busca (y encuentra) en la Iglesia Católica el cauce para poder canalizar sus anhelos espirituales, de comunicación con la realidad divina. Esta religiosidad popular, que moviliza a millones de personas cada año hacia lugares de peregrinación, y jalona el calendario de fiestas de contenido religioso, llena un vacío existencial, y ofrece una respuesta a la búsqueda de sentido y de identidad. Rozando a veces la superstición y el sincretismo, sin embargo hay aquí una fe genuina y sincera, reflejo de una visión trascendente de la realidad que va más allá de la vida que podamos percibir con nuestros sentidos.

La Iglesia, además, se convierte en dispensadora de bendiciones, institución valiosa a la cual poder recurrir en caso de necesidad, promesa de permanencia y garantía de estabilidad en un mundo siempre amenazado por lo efímero y por la violencia recurrente.

En India, donde he podido conocer algo la vida religiosa, la población cristiana, tan en minoría, ha sabido cultivar un sentido de pertenencia muy marcado, que les permite profesar su fe con orgullo. Siempre conscientes de ser una minoría en un universo dominado por religiones milenarias, los cristianos en Asia viven activamente su pertenencia a la Iglesia, a la cual dedican muchas energías y esfuerzos, y en la que depositan todas sus esperanzas y orgullo.

Y me sigo preguntando, cada vez más: ¿quién y qué es la Iglesia? ¿Es la curia, la jerarquía visible, heredera de la Cristiandad Romana de Constantino? ¿Son aquellos que, con fortuna diversa, copan los titulares en los medios de comunicación? ¿Es la religiosa misionera que atiende a los moribundos de SIDA en un hospital rural del África negra, son los millones de peregrinos que inundan el Santuario de la Virgen de Guadalupe en la ciudad de México el 12 de diciembre? ¿Es el grupo de oración que mantiene vivo el rezo del rosario entre los inmigrantes indios y filipinos en los países del Golfo, son los monjes cartujos que conservan una vida de paz y oración en medio de un mundo frenético, es la mujer de fe que lucha por mantener unida a su familia en la oración a pesar del alcoholismo de su marido? En este mundo global, en medio de sociedades cada vez más heterogéneas y diversas, cuando nos hemos acostumbrado ya a los términos multicultural y multilateral, la Iglesia ha adquirido tantos rostros como personas que creen en la buena noticia de Cristo encarnado, que se hace presente en todas y cada una de las realidades del mundo.

Creo que nadie puede arrogarse el privilegio de ser más Iglesia que los demás, pero tampoco nadie tiene porqué creerse menos Iglesia que aquellos a los que en ocasiones señalamos como “la Iglesia”. Ciertamente Jesús de Nazaret, un judío de hace 2000 años, no pudo prever el mundo en el que vivimos en el siglo XXI, pero su mensaje, que ha sido capaz de interpelar todas las culturas y civilizaciones a lo largo de la historia, tiene que asumir tantas caras como realidades en las que se sigue encarnando.

Yo creo en una Iglesia que, siendo una, tiene infinitas caras: diferentes entre ellas, pero que forman un cuerpo plural y diverso en el que todos tenemos cabida.

                                                                                 Pablo Cirujeda

jueves, 24 de octubre de 2013

VISITA DEL VICARIO GENERAL DE LA ARCHIDIÓCESIS DE MILWAUKEE A SABANA YEGUA, REPÚBLICA DOMINICANA

Del día 17 al 24 del pasado mes de septiembre el P. Pat Heppe, Vicario General de la Archidiócesis de Milwaukee (EE.UU.) visitó la parroquia La Sagrada Familia de Sabana Yegua. Su viaje fue una buena ocasión para fortalecer los vínculos entre la parroquia y la Archidiócesis de Milwaukee, hermanadas desde hace ya más de 30 años. Este hermanamiento, iniciado en 1981, se ha ido solidificando a lo largo del tiempo y, como el mismo P. Heppe nos recordaba, ha sido una fuente de bendiciones para ambas partes.

Fue una semana intensa en la que él participó de la actividad pastoral de la parroquia, incluyendo varias celebraciones litúrgicas. También pudo ver sobre el terreno algunos proyectos de promoción humana que llevamos a cabo en la región y que vinculan a mucha gente de Milwaukee con Sabana Yegua.

Desde aquí nuestro agradecimiento sincero al P. Heppe por su visita. Con su acostumbrada sencillez y jovialidad, y con sus palabras de apoyo, animó a todo el equipo parroquial de Sabana Yegua  a seguir adelante en la labor.


jueves, 17 de octubre de 2013

ESPACIO DE REFLEXIÓN

La religión, radicalmente redefinida por la transfiguración

El relato de la transfiguración, presente en los tres evangelios sinópticos (Mt 17,1-8; Mc 9,2-13; Lc 9,28-36), tiene sin duda una gran riqueza e importancia. Es de aquellos pasajes evangélicos que nunca parecen agotar su potencial expositivo, su profundidad.

Si aquí nos planteamos una vez más cuál es su mensaje esencial es para proponer que, en términos muy simples, lo fundamental es que los tres discípulos que acompañan a Jesús a lo alto de la montaña suben para encontrarse con Dios y se encuentran con un hombre.

Es bien sabido que muchas culturas han concebido las cimas de los montes como lugares propicios para el encuentro con la divinidad. En Israel mismo se han descubierto restos de altares paganos en lugares elevados. Y en el Antiguo Testamento, Moisés tiene que subir al Monte Sinaí para recibir la Ley de Dios, así como Elías busca el contacto con el Señor en las alturas del Monte Carmelo. Parecería que ahora el turno le toca al Tabor, que allí los discípulos verán a Dios. Podemos imaginar que los evangelistas construyen el relato para darnos a entender que con esta mentalidad subieron Pedro, Juan y Santiago la cuesta de este monte galileo, siguiendo a su maestro y amigo.

Pero lo que allí sucederá es radicalmente diferente. A quien encuentran, por decirlo así, es a Jesús. Él es quien se transfigura y se les muestra; y si Moisés y Elías aparecen es para luego, en seguida, desaparecer, y subrayar así que quien permanece es Jesús; y si se escucha una voz divina es para señalar que a quien deben escuchar es a Jesús (la voz, en efecto, no se señala a sí misma, su mensaje es que escuchen al maestro de Nazaret). Todo, así, apunta a una nueva realidad: que el lugar de encuentro con Dios ya no es la montaña, sino la persona.

En el Tabor no sucede nada divino. O sí, pero sucede en Jesús. Podríamos decir que con el episodio de la transfiguración terminan para siempre ya las antiguas religiones y empieza una forma nueva, totalmente diferente, de entender el hecho religioso (que muchas veces todavía hoy no hemos asumido y comprendido plenamente). Y es que en esta narración se nos describe diáfanamente que Dios ya no se quiere mostrar más que en el hombre. Esta es la gran originalidad del cristianismo. Que implica necesariamente, insistimos, una nueva forma de entender y vivir la religión. Desde aquí, desde la certeza de que el nuevo y definitivo lugar de la presencia de Dios es el ser humano, ser “religioso” ya no puede implicar el alejamiento de los demás para evitar la contaminación de lo mundano. Ya no puede significar el aprendizaje de extraños códigos, de una sabiduría a-humana, o in-humana, a la que sólo tendrían acceso unos pocos privilegiados; la religión ya no puede exigir el dominio de lenguajes extraños, propios e incomprensibles. Todo esto es lo que buscaría Pedro, asustado (al fin y al cabo, Lucas nos dice que Moisés y Elías, después de hablar claramente de la muy mundana realidad de la muerte de Jesús, que iba a consumar en Jerusalén, ya empezaban a irse cuando el primer apóstol lanzó su propuesta desesperada), al sugerir que se quedaran para siempre en la cima sagrada, compartiendo la revelación privilegiada de la que sólo ellos habían sido testigos.

Desde la transfiguración, la religión sólo puede comprenderse como algo radicalmente nuevo: de hecho, se trata de algo que poco tiene que ver con lo que todavía hoy muy a menudo concebimos como religioso. Porque para nosotros, la religión no puede ser ya otra cosa que comprender cada vez mejor nuestra humanidad, y vivirla plenamente. Que es exactamente lo que hizo Jesús con su vida.
                                                                                    Martí Colom


jueves, 10 de octubre de 2013

CHARLA SOBRE NUTRICIÓN PARA LAS ENCARGADAS DE FARMACIAS POPULARES DE LA PARROQUIA LA SAGRADA FAMILIA (REPÚBLICA DOMINICANA)

El programa de farmacias populares, que depende del centro de salud La Sagrada Familia, en Sabana Yegua, ofrece medicamentos a bajo costo a varias comunidades rurales de la región, muchas de ellas alejadas de centros de salud. Las mujeres responsables de las farmacias realizan esta labor de forma voluntaria para el bien de su comunidad, y regularmente amplían su formación sobre los medicamentos y su uso. En esta ocasión, aprovechamos la visita de la Dra. Mireia Morera, médico especializada en nutrición, para que diera una charla a estas mujeres y que ellas a su vez enseñen lo aprendido a sus comunidades. Las comunidades tienen numerosos problemas y deficiencias nutricionales, así que la formación compartida por la Dra. Morera fue muy beneficiosa.



jueves, 3 de octubre de 2013

ESPACIO DE REFLEXIÓN

“Venid y lo veréis”

La invitación de Jesús a los que, intrigados, le preguntan dónde vive, “venid y lo veréis” (Jn 1,38-39), indica en primer lugar que el Evangelio no se puede explicar como si fuera una teoría: hay que experimentarlo, hay que verlo. Ahora bien, esta invitación tiene otro aspecto que merece ser meditado: si le decimos a alguien que venga para ver, que venga y vea, debemos tener algo que mostrar. No sea que quien se decida a venir llegue y encuentre una casa desangelada, una comunidad sin alegría, un envoltorio sin nada dentro, una Iglesia sin espíritu.

Los cristianos no podemos quejarnos de que nuestras iglesias están vacías sin hacernos a la vez una pregunta auto-crítica: aquellos que de vez en cuando deciden asomarse a nuestras comunidades, aquellos que, en una palabra, “vienen”… ¿“ven” entonces algo atractivo, algo que les interpele?

No tenemos mucho derecho a lamentar la indiferencia de muchos hacia la fe si cuando se animan a visitarnos no descubren en nosotros nada que les hable al corazón. De nuevo: si invitamos a alguien a venir y a ver, debemos tener algo que mostrar. 
                                                                                       Martí Colom


lunes, 30 de septiembre de 2013

VISITA EPISCOPAL EN JARDINES DE SAN JUAN AJUSCO, MÉXICO

El día 29 de agosto Monseñor Andrés Vargas, obispo de la 8ª Vicaría de la Ciudad de México, visitó la parroquia Santo Tomás Ajusco, a la que pertenece el Centro Infantil que dirige allí la Comunidad de San Pablo. Como parte de la visita, Mons. Vargas quiso conocer el Centro Infantil, que atiende diariamente a 82 niños. Allí pasó salón por salón y habló con los niños, felicitando a las maestras por su labor. La visita coincidió con una reunión de padres y el obispo tuvo la oportunidad conocer más la realidad del barrio y del trabajo que se realiza en el Centro Infantil. También pudo dirigir unas palabras de ánimo a los padres acerca de la importante labor de educar a sus hijos.


jueves, 26 de septiembre de 2013

“SONRÍE Y CRECE” EN LA REPÚBLICA DOMINICANA

Un verano más, los jóvenes de la Asociación Sonríe y Crece de Barcelona han llevado su entusiasmo a los niños y niñas de Sabana Yegua. Con las clases de repaso escolar por las mañanas, y las tardes de juegos educativos, movilizaron a más de 250 niños y niñas. Este verano pusieron especial énfasis en que fueran los monitores dominicanos ya formados por ellos los que llevaran las riendas de los juegos. Asimismo, iniciaron la tarde de juegos en la comunidad del Proyecto 4 (a 3 km. de Sabana Yegua), en la que muchos niños disfrutaron con ellos de lo que ya todos llaman “el verano”. ¡Os esperamos el año próximo!



jueves, 19 de septiembre de 2013

LA CASA SAN JOSÉ EN LA FERIA DE LA CULTURA Y TRADICIÓN DE COCHABAMBA (BOLIVIA)

Los niños y adolescentes acogidos en la Casa San José de Cochabamba participaron recientemente de la Feria de la Cultura y Tradición, organizada por la Alcaldía de esta ciudad: mostraron sus artes culinarias preparando la “pisara”, una comida tradicional elaborada a base de quinua. El grupo de la Casa San José, pudo ofrecer este delicioso plato a todos los visitantes de la Feria. También aprovecharon para tomar parte de los concursos de dibujo, pintura, trompos y canicas. Para todos ellos, fue un maravilloso día. 


lunes, 16 de septiembre de 2013

¡QUÉ DIVERTIDO ES LEER! “CUENTACUENTOS” EN LAS BIBLIOTECAS DE LA ZONA DE SABANA YEGUA (REPÚBLICA DOMINICANA)

Son ya tres las bibliotecas que hemos iniciado en la zona de la parroquia La Sagrada Familia de Sabana Yegua, y para animar a los niños a leer, este pasado mes de agosto se ha realizado un “CUENTACUENTOS” con la ayuda de dos jóvenes voluntarias de Barcelona. En cada biblioteca se contó un cuento de una manera divertida y con dibujos explicativos y después se comentó el cuento con los niños. Acto seguido muchos pequeños que todavía no eran socios se apresuraron a pedir su carnet y así poderse llevar a casa un cuento tan interesante como el que habían escuchado con atención. ¡Gracias a Clara y a Mar por su colaboración! 


jueves, 5 de septiembre de 2013

CONSTRUCCIÓN TRES PRESAS DE TIERRA EN EL ALTIPLANO DE COCHABAMBA, BOLIVIA

La Comunidad de San Pablo ha empezado un nuevo proyecto en la provincia Ayopaya del departamento de Cochabamba, en Bolivia. Se trata de la construcción de tres atajados (presas de tierra), cada uno con una capacidad de 300 metros cúbicos. Desde los atajados se canalizará el agua a través de una red de distribución, finalizando en un sistema de riego por aspersión, que cubrirá un área de 70 hectáreas de terrenos cultivables. Se beneficiarán del proyecto 40 familias de la comunidad de Totorani. Las familias están muy entusiasmadas y dispuestas a trabajar durante los dos meses programados para construir las infraestructuras necesarias. Una vez finalizada la construcción se tendrá una alternativa de producción de hortalizas, frutas y granos que ayudará a generar recursos alimenticios y económicos y así disminuir su nivel de pobreza, causada principalmente por la poca productividad de sus tierras. 




jueves, 22 de agosto de 2013

DONACIÓN DE LIBROS PARA MINI-BIBLIOTECAS EN LA ZONA DE AZUA (República Dominicana)

El proyecto de mini-bibliotecas de la Parroquia La Sagrada Familia de Sabana Yegua avanza. Actualmente existen dos pequeñas bibliotecas con 500 y 75 socios respectivamente. En 2013 se iniciarán cinco mini-bibliotecas más en otras tantas comunidades rurales de la región, para fomentar la lectura entre los niños y jóvenes con el préstamo de libros. Agradecemos a FUNDEBIDO, Editorial Santillana y Editorial SM sus recientes donaciones de libros para fomentar la lectura en la República Dominicana.



viernes, 16 de agosto de 2013

ESCUELA DE TEOLOGÍA EN AZUA: “POR UN LAICADO DE FE ADULTA”

El día sábado 10 de agosto empezaron las clases de teología para laicos en el Colegio Buen Pastor de Azua (República Dominicana). Miembros de la Comunidad de San Pablo en colaboración con el Instituto Nacional de Pastoral de la Conferencia Episcopal Dominicana se embarcaron en esta iniciativa, nueva en la Diócesis de San Juan de la Maguana. Se logró coordinar el inicio de un Diplomado en Teología para laicos de la zona de Azua (zona eclesiástica formada por 14 parroquias). El diplomado consta de 22 módulos. El primer sábado se empezó con dos módulos y por el momento la respuesta de varias parroquias ha sido muy buena: hay en total 59 estudiantes deseosos de profundizar en su fe a partir del estudio. Instructores y alumnos han empezado un proceso de aprendizaje que fortalecerá su fe y a la vez brindará una cosecha de laicos formados y comprometidos que podrán acompañar a sus parroquias y comunidades eclesiales de base.  


jueves, 15 de agosto de 2013

FIN DE CURSO EN EL CENTRO SAN JOSÉ DE JARDINES DE SAN JUAN, AJUSCO (MÉXICO D.F.)


El centro San José finalizó el curso con la ceremonia de graduación de los pequeños. Cada año, cuando un grupo termina su estancia en el centro para poder continuar con la primaria, nos damos cuenta que aquellos niños han superado un reto, han subido un peldaño. Y en el centro San José quedan las profesoras, con la sensación de la tarea cumplida. Ellas ven pasar generaciones de pequeños que no serán olvidadas, generaciones de niños y niñas llenos de alegría, de inocencia y de mucha imaginación. Algún día estos muchachos pensarán en su infancia y en el Centro San José, que esperamos que recuerden como una etapa alegre y llena de cariño por parte de las profesoras. Pues como dice el psiquiatra Enrique Rojas: “Casi todo lo humano está en la infancia. Cuando esa etapa ha sido feliz, sana, llena de afecto y bien enfocada, uno sale fuerte para todo”.


jueves, 8 de agosto de 2013

CAMINATA CONTRA EL MALTRATO INFANTIL EN LA REPÚBLICA DOMINICANA

Recientemente las profesoras y niños del Centro de Nutrición Infantil San Agustín, en el barrio San Francisco de Sabana Yegua, salieron a la calle para manifestarse contra el maltrato infantil. Fue una hermosa jornada de toma de conciencia  acerca de este grave problema: para ello los pequeños realizaron sus propias pancartas reivindicativas con las que salieron a hacer la caminata por todo el barrio, invitando especialmente a sus padres y madres a educarles sin golpes ni violencia. 


jueves, 1 de agosto de 2013

ESPACIO DE REFLEXIÓN

El servicio como buena noticia

En la última cena, tal y como nos la explica el Evangelio de Juan, y con el gesto genial de lavar los pies a sus discípulos, Jesús confirma que para él lo más importante es el servicio (Jn 13,1-17). De hecho no deja de ser chocante que en aquella última oportunidad no hable a sus discípulos de Dios, ni les enseñe una oración, ni siquiera les consuele o anime ante lo que se les viene encima… les habla de lo que siempre les ha hablado, de la entrega y la generosidad que construyen el reino, del espíritu de servicio que posibilita un mundo nuevo. En este sentido, está claro que el gesto de lavar los pies es equivalente al gesto de partir el pan, que es su cuerpo: una invitación a vivir sirviendo.

Sirviendo, no siendo servil. Pues aunque servicio y servilismo aparentemente se parezcan (lo que “sucede” y “se ve” es muy parecido), en realidad no tienen nada que ver, pues el servicio se hace libremente, por amor, mientras que el servilismo es el favor que se presta a alguien con autoridad para evitar un mal o para conseguir un bien. A Jesús no le interesa el servilismo, porque denigra al que “sirve” y deshumaniza al que “es servido”.

Jesús, pues, habla de servicio. Y la cuestión fundamental que debemos plantearnos es esta: ¿Y dónde está la buena noticia en este mensaje? ¿Por qué es buena noticia la llamada a servir?

La respuesta cristiana es que vivir en actitud de servicio nos hará felices, y que por eso es buena noticia. Y sin embargo… ¡cuánto nos cuesta creer eso! La duda persiste: ¿por qué es el servicio el camino hacia la felicidad? ¿En qué sentido? ¿De qué sirve servir?

Ensayemos algunas respuestas. La primera es que el servicio nos libera.

Para ver eso, deberíamos pensar cómo concebimos la relación entre el servicio la libertad. ¿Qué ocurre a menudo? Que confrontados con estas dos dimensiones de la vida humana, pensamos que una es positiva y otra negativa. Quizá no lo decimos, pero lo pensamos. Y entonces buscamos la primera (la libertad) pero rehuimos la segunda (el servicio). Todos corremos a apuntarnos a “ser libres”, mientras que el servicio más bien intentamos evitarlo ―“que eso lo haga otro”, diríamos. Porque nos parece que esto de “servir” en realidad va a menoscabar nuestra libertad. Casi como si fueran cosas incompatibles. Y discurrimos así: “Si quiero ser libre no puedo servir, porque si sirvo no podré ser libre”.

La propuesta de Jesús, y toda la vida cristiana, es ni más ni menos que una respuesta a esta situación. Jesús viene a dar testimonio de que (en contra de lo que pueda parecer) no sólo servir no limita nuestra libertad, sino que de hecho el servicio nos libera. Más que eso, el Evangelio se podría resumir así: sólo a través de una actitud de servicio (sincera, real) encontraremos una libertad auténtica, duradera, sólida. Y por lo tanto, todos los intentos de ser libres sin servir fracasarán.

¿Y cómo nos libera el servicio?

El servicio libera porque nos hace salir de nuestros pozos interiores, de las trampas que nos tiende la preocupación por nuestro propio bienestar. Interesándonos por las vidas de los demás relativizamos nuestros propios problemas.

El servicio nos libera de vivir pensando en clases, categorías, elites y exclusividades. Nos hace iguales. En el servicio nadie alardea de ser “más que” el otro. El servicio elimina la necesidad de competir, de conseguir reconocimiento y estatus.

En este sentido, el servicio nos libera de la preocupación por nuestra imagen. A alguien que sirve no le importa mucho la apariencia ―sus buenas obras son su mejor perfil.

El servicio también nos libera de la negatividad, de la desesperanza; nos ayudamos unos a otros porque confiamos en que juntos podemos mejorar nuestras vidas.

Y el servicio libera nuestra ternura, que demasiadas veces queda presa en nuestro interior. Servir nos permite ser tiernos y delicados con los demás.

Además de ser liberador, el servicio es buena noticia porque nos ayuda a realizarnos como personas: una vida de servicio es una vida satisfactoria.

Alguien podría argumentar que todas estas respuestas no acaban de llegar al corazón del asunto. Podría objetarse que muchas otras cosas nos liberan y nos ayudan a realizarnos: la contemplación de una obra de arte, por ejemplo, también puede ayudarnos a salir de nosotros mismos. Y no podemos dudar de que existan infinidad de ocupaciones que, sin tener nada que ver con el servicio, también pueden ayudar a que quien las desempeña se sienta realizado. Tiene que haber algo más, algo específico del servicio.

Quizá lo que sí logra únicamente el servicio, lo que realmente lo convierte en el camino más seguro hacia la felicidad, es en definitiva que posibilita el amor. Es muy difícil amar a un egoísta. Alguien que nunca ayuda a nadie, que nunca sirve, termina inevitablemente sin amistades profundas. Al final, superados elementos externos que hacen que alguien nos resulte más o menos atractivo, lo que realmente crea vínculos duraderos entre las personas es que sepamos que podemos contar unos con otros.

Por eso, volviendo al relato que Juan hace de la última cena, cuando Pedro le dice a Jesús que no le lave los pies, Jesús contesta: “Si no te los lavo, no tienes nada que ver conmigo”. Porque las personas terminamos amando a y “teniendo mucho que ver con” aquellos que son generosos. El amor, sin el que no existe la felicidad, no puede crecer sin el servicio. Así, el servicio es buena noticia porque amamos a quien nos ayuda y amamos a quien ayuda: la misión compartida crea un vínculo que nada más puede crear.

Deberíamos animarnos a vivir esta maravilla: las consecuencias gozosas de entender que el servicio no es una trampa que nos encadena sino un trampolín que nos hace volar hacia la libertad más alta y la felicidad más real.


                                                                     Martí Colom

martes, 30 de julio de 2013

SERIE DE CHARLAS SOBRE EL CONCILIO VATICANO II EN RACINE (WI), EE.UU.

Las mujeres en la Iglesia después del Vaticano II


La tercera charla de la serie sobre el Concilio Vaticano II en la conmemoración de sus 50 años, auspiciada por la Comunidad de San Pablo y la Parroquia Católica Sacred Heart de Racine (WI) en EE.UU, tuvo lugar pasado 12 de julio. La ponente fue la Hna. Frances Cunningham, OSF, ex-directora de la Oficina de Misiones de la Archidiócesis de Milwaukee, y parte del equipo de gobierno de las School Sisters of St. Francis durante 12 años. En su presentación la Hna. Cunningham explicó los pasos que dio el Concilio para aumentar la participación de las mujeres en la Iglesia. Analizó cómo algunas promesas del Concilio cambiaron la Iglesia y también como otras no se cumplieron. Para finalizar, la Hna. animó a los más de 70 participantes a que las promesas a las mujeres se puedan incorporar y cumplir a nivel de parroquias y de iglesia diocesana. 



jueves, 25 de julio de 2013

VISITA DE JÓVENES A CENTRO AGRÍCOLA EN COCHABAMBA

En el municipio de Vacas (Cochabamba, Bolivia) se sigue apoyando a la educación de los jóvenes en el Centro Multifuncional Totorampampa. A fines del mes pasado veinte jóvenes participantes del centro realizaron una excursión a la ciudad de Cochabamba; para muchos era su primera vez en la ciudad. Visitaron también el centro Agroforestal Combuyo donde se está realizando una investigación para crear un sistema agroforestal sostenible. A los jóvenes les gustó mucho, porque ven posible implementar este tipo de trabajos en sus pueblos y también porque muchos de ellos están participando en el trabajo forestal, por lo cual les ha fascinado ver espacios con una gran variedades de árboles.